miércoles, 7 de diciembre de 2016

CAPÍTULO 50: NO SÉ CUÁNDO FUE

Cómo ha podido pasar esto? Cómo ha podido pasar esto después del susto que nos dimos? Como he podido no ser consciente? Tuvo que ser en la playa, en esa maldita playa. Tuvo que ser ahí. Pienso con rabia en el sonido de las olas, lo voy a odiar toda mi vida. Serénate Malú, me digo a mí misma. Tranquilízate. Vamos… Toda la noche llorando y maldiciendo no puede ser bueno. Ni siquiera sé a qué hora me dormí. No sé qué voy a hacer, no sé a dónde ir. Ayer apagué el teléfono por puro cansancio. Me cansé de leer los whatsapps de Álex y no tener ganas de contestarle.

-Nena, a qué viene tanta prisa? – dice Vero entrando en casa –

No puedo evitarlo. Es verla y tener de nuevo ganas de llorar. Rompo a llorar desconsolada bajo su atenta e interrogante mirada. No soy capaz de decir una sola palabra hasta llegar al sofá, agarrada del brazo por ella.

-Nena, qué pasa? – me mira interrogante – ha pasado algo? – me tapo la cara con las manos – me estás asustando…

Acierto a señalar la mesa, donde siguen estando desde ayer los 3 test. La observo, mientras sigo llorando, aunque más débilmente.

-Pero… - me mira boquiabierta – son tuyos?

-No – digo irónica – son de la vecina… - digo sollozando –

-Pero Malú… - se tapa la boca mirándome – hostia… - murmura – estás embarazada? – asiento volviendo a llorar – madre mía… - dice en voz baja, como si no pudiera escucharla – y es de Álex? – la miro sorprendida –

-No – vuelvo a poner ese tono irónico – es de el del quiosco ese de ahí de la esquina…

-Bueno yo lo tengo que preguntar… - dice sin darle importancia – él lo sabe?

-Pfff… - resoplo – claro que lo sabe… - intento aguantarme las ganas de llorar – qué voy a hacer Vero?

-Bueno, vamos a calmarnos… - hace un gesto con las manos –

-No puedo calmarme Vero… - digo con tono desesperado – esto no tenía que pasar ahora… - niego con la cabeza – no puede ser…

-Lo primero que hay que hacer es ir a un ginecólogo a confirmar esto… - mira hacia la mesa – aunque mucha confirmación no creo que haga falta…

-Esto no puede estar pasando… - repito como un robot –

-No Malú, basta… - se levanta del sofá – a los imprevistos hay que hacerles frente… - dice decidida – qué ha dicho Álex cuando se lo has contado?

-Le eché de casa ayer… - digo volviendo a llorar – es que lo quiero matar… si no se va ayer, le hubiera matado…

-Claro – dice irónica – él es el culpable de esto… - resopla – Malú, que eres mayorcita… - niega con la cabeza, dejándome descuadrada – seguro que le montaste una escena… - bajo la cabeza algo avergonzada – rectifico – carraspea – lo primero que tienes que hacer es llamarle para que venga y que apechugue con esto…

-Ni hablar… - digo con un hilo de voz – no quiero verle…

-No te olvides que él también forma parte de esto – dice seria –

No hay comentarios:

Publicar un comentario